domingo, 23 de agosto de 2009

poesia difusa


Soy poesía difusa en el tiempo
divagando soledades,
cual hoja seca del último árbol
de un otoño en destierro.

Soy mujer
de corazón sensible
clamando ternura
a gritos de silencio,
a oídos sordos.

Soy fruta madura que fermenta
en propias remembranzas.
Soy caricia de luna
que se perdió en la bruma
de un invierno.

Nadie sabe
si mi pecho arde
ó es témpano de hielo.
No sospechan
que se quema mi cuerpo
en agudos silencios.

Nadie me ha visto llorar
cuando una quimera
se disuelve en el pecho
detrás de una puerta.

No adivinan
mi alma sombría,
mis sentimientos furtivos,
mi marcada tristeza.

Nadie conoce mi poesía difusa.

Despedida

Cuando le vi alejarse
vi a través de un cristal movedizo
empapado de lluvia
y mis ojos se inundaron.
Cuando le vi alejarse
un aire resignado expiró
desde mis labios.
Cuando le vi alejarse
salió de mi boca
una voz que no era la mía
que le amaba y por ende necesitaba.
Cuadno lo vi alejarse, mi corazón
estalló en recuerdos que pronto
invadieron mi atmósfera.
Y a cada paso suyo, se agrandaba el horizonte
y el sol era devorado por el suelo…
cayendo a una velocidad tan lenta…
como mis pensamientos detenidos
en su sombra.
Y pensé,
pararlos para siempre
en tan melancólico recuerdo
al que aguardaba la felicidad.

Sos poesía


Lo peor es que con o sin la intención
me fuiste ganando de a poco.
Y antes de que me diera cuenta,
mi garganta entró en el vicio del suspiro.
La risa, la voz de tus labios fue todo
cuánto oír yo quería.
Y las venas de mi sangre,
se dicen mías…
¡cuando quisiera fueran tuyas!
En cada pulso sostenidas y perdidas
alteradas por más rojo.
Y más latir entre tu presencia cercana.
Mi causa, mi deseo,
¡vos mismo sos poesía!
Los versos y la rima
la belleza que castiga.
Somete a un delirio
a cuyas proporciones no escapo…
tamaña…como el instante de un día.